Quien es Santa Claus?

 Hacia el siglo II un sacerdote cristiano llamado Nicolás abandonó Italia, para difundir en Asia la palabra de Dios. Siendo misionero, fue trasladado a Myra, para ser nombrado obispo. Murió un 6 de diciembre, fue proclamado santo e inspiró la figura de Papá Noel. La figura de Santa Claus, con la estética que ahora conocemos, es una invención estadounidense del siglo XX, si bien se basó en la vida y la leyenda de San Nicolás. Actualmente, se designa al mismo personaje en los distintos países, como Santa Claus, Papá Noel o San Nicolás. Aunque en ciertos lugares el día de San Nicolás se celebra el 6 de diciembre. El nombre Santa Claus es una contracción de Sanctus Nicolaus, y se refiere específicamente a San Nicolás de Bari, quien fuera Obispo de Mira en el S. IV, personaje de una enorme bondad y protector sobretodo de los niños. Se creó sobre él una bonita leyenda que decía que por las noches repartía regalos entre los necesitados y los niños.
 En el medioevo, la imagen de San Nicolás era la de un arzobispo de barba blanca que viajaba en un caballo, acompañado de un sirviente moro llamado Pedro el Negro. En una gran bolsa llevaba regalitos para repartir a los niños obedientes y un manojo de varas para los desobedientes.
 Santa Claus llegó al continente americano traído por los colonos holandeses. Pero fue la literatura la que se encargó de hacerlo bastante popular en el siglo XIX; primero, un relato de Washington Irving lo dio a conocer y, luego, un poema de Clarke Moore lo describió como un simpático duende, ataviado con pantalón y chaqueta de color rojo vivo, con ribetes de peluche blanco, y grandes botas negras.
 Entre 1860 y 1880, el ilustrador Thomas Nast reforzó aún más la leyenda del personaje, que aparecía fabricando regalos en su taller del Polo Norte y tenía una lista de niños buenos y malos de todo el mundo.
 Pero el Santa Claus que todos conocemos hoy,  proviene de una campaña publicitaria lanzada por The Coca-Cola Company en 1931. Esta vez, el encargado de darle un nuevo aspecto al personaje legendario fue el dibujante Habdon Sundblom y desde entonces fue adoptado casi universalmente. Todos recordamos al vejete simpático de larga barba blanca , capucha roja y chaqueta roja con adornos de piel en blanco. Y hoy conocido como símbolo del tiempo de Navidad.
                                                  

El Arbolito de navidad

El árbol de Navidad es un árbol decorativo, típico de la fiesta de Navidad. Tradicionalmente suele emplearse una conifera de hoja perenne, destacando entre ellas las especies abies nordmanniana y picea excelsa En la actualidad también está muy popularizado el uso de árboles artificiales de plástico y otros materiales sintéticos. Se decora con elementos navideños como esfera, luces, estrellas, lazos, espumillones y otros elementos decorativos.

Un poquito sobre la navidad.....

La navidad es un tiempo hermoso donde las familias comparten juntos... donde mas se unen. Esta se celebra por el nacimiento de Jesus aunque ya hoy en dia esto se a olvidado y solo ven la navidad como una temporada para bailar, salir, beber sin darle la menor importancia al nacimiento de Jesus.


¿Qué significa la Navidad?

A veces, de tanto hacer algo, se nos olvida porqué lo hacemos o para qué sirve. Algo así nos puede pasar con la Navidad. Tanto nos la promueven, tanto nos la recuerdan los medios y la publicidad, que corremos el riesgo de olvidar o, por lo menos, diluir su significado. Por eso, vale la pena detenernos un momento y recordar que significa esta fecha y de qué manera la estamos viviendo.

Es, claro, una celebración de la familia, donde nos reunimos y la pasamos lo mejor posible; convivimos y recordamos esas viejas historias de familia que tanto significan. Y también es la celebración de qué, al nacer Jesús, pasamos a ser parte de la familia del mismo Dios.

Por supuesto, es una celebración de los niños, a los que les llegan misteriosamente regalos y donde se juega el juego amoroso de buscar los juguetes para ver si los Santos Reyes de veras existen. También es la fiesta de todos, porque todos, en algún rincón de nuestra alma, no dejamos de ser niños. Pero, sobre todo, celebramos al más importante de todos los niños, al Niño Jesús, que nació como el menos importante de los niños y llegó a ser el más importante de los hombres, Dios hecho hombre.

Celebramos la ocasión de poder demostrar a los amigos nuestro aprecio, nuestro cariño, la posibilidad de intercambiar regalos. Aquí, posiblemente, es donde más han influido el comercio y los medios para hacernos sentir mal si no damos un regalo, entre más caro, mejor. Pero, exageraciones aparte, no deja de ser valioso el celebrar la generosidad y el cariño de una manera concreta. Y con esto, posiblemente sin ser conscientes, celebramos el mayor de todos los regalos: Dios Padre, regalándonos a su Hijo para que nos salváramos del pecado y de la muerte.